El llanto es una respuesta natural que tenemos los humanos a una variedad de emociones como la tristeza, el enojo, la alegría y la frustración. Es una forma importante de comunicar y procesar emociones y un método de afrontamiento saludable. En los bebés, las lágrimas tienen el papel de buscar la atención y el cuidado de los adultos. Las lágrimas muestran a los demás que somos vulnerables, y la vulnerabilidad es fundamental para la conexión humana.
Producimos tres tipos de lágrimas:
- Basales: que son antibacterianas, ricas en proteínas, ayudan a mantener los ojos húmedos cada vez que parpadeamos.
- Reflejas: Son lágrimas desencadenadas por irritantes como el viento, el humo o la cebolla. Se liberan para eliminar estos irritantes y proteger el ojo.
- Emocionales: aquellas que surgen como respuesta a emociones. Estas lágrimas contienen un nivel más alto de hormonas antiestrés y proteínas. Este mayor contenido de proteínas hace que las lágrimas emocionales sean más viscosas, por lo que se adhieren a la piel con más fuerza y corren por la cara más lentamente, lo que hace que sea más probable que otros las vean.
Cuando las personas hablan de llorar, generalmente se refieren a lágrimas emocionales.
A veces nos aguantamos el llanto porque lo vemos como un signo de debilidad, pero la ciencia sugiere que en realidad llorar tiene varios beneficios:
- Tiene un efecto calmante: el llanto activa el sistema nervioso parasimpático (SNP), que ayuda a las personas a relajarse: hace más lenta la respiración y el ritmo cardíaco. Cuando surgen emociones fuertes, el llanto lo ayuda a regresar a su estado de equilibrio normal. Aunque no es un alivio instantáneo porque se necesitan unos minutos de llanto y respiración profunda para que el ritmo cardíaco disminuya y el cuerpo se relaje.
- Ayuda a recibir apoyo de otras personas: el llanto es un comportamiento de apego, ya que incita al apoyo de las personas que nos rodean. Especialmente en casos de duelo compartido o frente a un desastre, el llanto puede ser una forma importante de vincularse con los demás. Llorar ayuda a comunicar a los demás lo que estás sintiendo y experimentando. Permite que las personas determinen cómo reaccionar y qué necesita de ellos. Llorar aumenta la empatía, las lágrimas emocionales incitan a otras personas a ofrecer apoyo y te hacen sentir mejor.
- Ayuda a aliviar el dolor: las lágrimas emocionales liberan oxitocina y endorfinas. Estos químicos hacen que las personas se sientan bien y también pueden aliviar el dolor físico y emocional. De esta manera, el llanto puede ayudar a reducir el dolor y promover una sensación de bienestar.
- Mejora el estado de ánimo y alivia el estrés: la oxitocina y las endorfinas pueden ayudar a mejorar el estado de ánimo.
- Ayuda a dormir: los efectos calmantes, que mejoran el estado de ánimo y alivian el dolor del llanto pueden ayudar a una persona a conciliar el sueño más fácilmente.
- Combate las bacterias: el llanto ayuda a matar las bacterias y a mantener los ojos limpios, ya que las lágrimas contienen un líquido llamado lisozima.
- Llorar regula la presión arterial: Se ha descubierto que el llanto reduce la presión arterial y el pulso (la presión arterial alta puede dañar el corazón y los vasos sanguíneos y contribuir a un ACV, insuficiencia cardíaca e incluso demencia)
- Puede mejorar el estado de ánimo: a diferencia de las lágrimas reflejas y basales, las lágrimas emocionales contienen hormonas del estrés, así como el mineral manganeso . El manganeso se asocia con la ansiedad, la irritabilidad y el nerviosismo , por lo que el llanto es una forma de liberar tensiones.
Y para quienes les cuesta mucho llorar o no lloran casi nunca… ¿Es malo no llorar?
No todo el mundo llora por la misma razón, ni con la misma frecuencia ni con la misma intensidad, y eso está bien.
Sin embargo, reprimir las emociones puede tener consecuencias para la salud mental . Cuando tratas de reprimir tus sentimientos de dolor, tristeza, ira o dolor, en realidad puedes aumentarlos. No llorar, a corto plazo, puede provocar irritabilidad, problemas para dormir y aumento de la ansiedad . Cuando nos aguantamos mucho el llanto y contenemos mucho las emociones (eso se llama afrontamiento represivo ) tenemos más riesgo de tener una salud inmunológica deficiente, enfermedades cardiovasculares y presión arterial alta.
Algunas personas tienen problemas para llorar y se sienten físicamente incapaz de hacerlo, esto podría ser una señal de otro problema médico.
¿Qué podemos hacer para empezar a normalizar nuestra necesidad de llorar?
Seamos realistas: han sido tiempos muy intensos. Es posible que hayamos llorado más que en el pasado.
Necesitamos validar todas las emociones, incluyendo las que nos hacen sentir incómodos, o que nos hacen llorar.
Podemos usar como ejemplo a los japoneses, ellos creen tanto en los beneficios del llanto para la salud que algunas ciudades de Japón ahora tienen «clubes de llanto» llamados rui-katsu (que significa, literalmente, «búsqueda de lágrimas»), donde la gente se reúne para disfrutar de buenos sollozos a la antigua. (Para ayudar a que fluyan las lágrimas, los participantes ven dramas lacrimógenos).
Hidefumi Yoshida, un profesor Japonés conocido como ‘namida sensei’ (profesor de las lágrimas), visita escuelas, universidades y empresas para enseñar el arte de llorar. Él dice que “el llanto es más efectivo que la risa o dormir para reducir el estrés. Si lloras una vez a la semana, puedes vivir una vida libre de estrés”.
La pregunta es, ¿si el llanto es una acción tan primitiva, por qué nos olvidamos de hacerlo y necesitamos que alguien nos enseñe o diga que está bien hacerlo? Bueno, vivimos en sociedades en las que el llanto está erróneamente asociado con la debilidad.
Bueno quizás nosotros no estamos culturalmente preparados para llorar en grupo como los japoneses, pero podemos buscar un lugar seguro donde podamos llorar en privado.
¿Por qué a veces lloramos cuando reímos?
Si bien esto parece una combinación extraña, ciertamente es común.
Esto pasa porque el cuerpo está tratando de regularse a sí mismo mientras responde a las emociones fuertes. Cierta evidencia sugiere que el llanto y la risa están controlados por la misma parte del cerebro. La risa puede aplicar presión alrededor de los conductos lagrimales, lo que produce lágrimas reflejas.
¿Llorar nos puede hacer sentir peor?
A pesar de todos los beneficios del llanto, si lloras con personas que no validan tus emociones, o que se burlan de ti, lo más probable es que te sientas peor. Por eso es muy importante buscar un lugar seguro para llorar, cuando esté en nuestras manos poder elegirlo.
¿Cómo consolar a alguien que está llorando?
Quizás tenemos que cambiar la creencia de que nuestra misión es consolar a alguien que está triste, porque a veces las situaciones difíciles no tienen consuelo en el momento. En realidad, lo que tenemos que hacer es acompañar, estar ahí.
Cuando una persona llora, por lo general no quiere un consejo a menos que lo pida explícitamente. Ya está en una posición vulnerable, por lo que probablemente no quiera sentir que la estás juzgando o tratando de tomar decisiones por ella. Es importante que valides sus sentimientos, los entiendas o no.
Si sientes que es apropiado dar un consejo a alguien después de haberlo consolado (tal vez incluso te lo haya pedido), solo asegúrate de que no se sienta presionado a seguirlo.
Hay algunas frases que pueden ayudar alguien a desahogarse (y sentirse cómodo contigo mientras acompañas):
- “Estoy aquí para escuchar. Puedes desahogarte”
- “Estoy aqui contigo»
- “Eres importante para mí, y tus sentimientos también son importantes”
- «Puede que no entienda exactamente cómo te sientes, pero no estás solo»
- “Lamento mucho que estés pasando por esto. ¿Hay algo que pueda hacer?»
Lo importante es comunicar interés y conexión en un momento de tristeza y llanto. Si no estás preparado para hablar no importa porque hay otras maneras de acompañar, por ejemplo, con el lenguaje lenguaje corporal, tu historia compartida y tu sintonía. Las respuestas verbales son simplemente otra forma de conectarse.
Además, es importante:
- Asegurarte de que la persona se sienta segura: puede que tenga miedo a llorar frente a los demás porque la sociedad considera que el llanto es una debilidad. Si la persona empieza a llorar en público, ofrécele ir a un lugar más privado. Esto puede ayudar con cualquier vergüenza que sientan. Vaya a un baño, automóvil o habitación vacía. Estar en un lugar privado puede ayudarlos a sentirse seguros y capaces de superar cualquier emoción que sientan.
- Ofrecer un pañuelo: ofrecer un pañuelo es una señal de que quieres ayudar. Si no hay pañuelos cerca, ofrezca conseguir uno para ellos.
- Dale tiempo. Si estás ahí para consolar, da el tiempo que necesita. Tu sola presencia puede ser reconfortante.
¿Con cuánta frecuencia es recomendable llorar? ¿Cuándo las son lágrimas un problema?
Algunas personas lloran fácilmente y lloran cuando están felices, conmovidas, tristes, conmovidas, abrumadas, básicamente cualquier intensidad emocional. Esto no es un problema de salud mental, más bien es parte de una respuesta emocional intensa.
Es completamente normal llorar todos los días si estamos viviendo un duelo. Pero si simplemente lloras porque sí, o cuando el llanto comienza a afectar las actividades diarias o se vuelve incontrolable, podría ser una señal de que algo anda mal.
También es posible que las personas que sufren de ciertos tipos de depresión no puedan llorar, incluso cuando tienen ganas. En cualquiera de estas situaciones, lo mejor sería consultar a un profesional médico que pueda ayudar a diagnosticar el problema y sugerir el tratamiento adecuado.
Por desafiante que sea, la mejor manera de manejar los sentimientos difíciles, incluidos la tristeza y el dolor, es aceptarlos. Es importante que te permitas llorar si tienes ganas. Asegúrate de tomarte el tiempo y encontrar un lugar seguro para llorar si es necesario.
Recomendaciones para quienes nos escuchan
Es tiempo de repensar el llanto, especialmente en niños y hombres.
Necesitamos aprender las habilidades de cómo reconectar con las emociones, esta educación debería comenzar temprano, en el hogar o en la escuela, con los adultos haciendo que sea seguro para los niños hablar sobre sentimientos difíciles.
Se necesita mucho desaprendizaje para comprender que ser fuerte, independiente y resistente es compatible con el llanto.
Lloremos, porque cuando lloramos podemos tener conversaciones de salud mental más honestas.
¿Por qué sentimos un “nudo en la garganta” cuando estamos muy tristes?
Es una respuesta al llanto y al estrés que experimenta el sistema nervioso simpático, que desencadena la respuesta de lucha o huida cuando nos vemos amenazados por algún peligro. La respuesta de lucha o huida cierra funciones corporales innecesarias, como la digestión, y aumenta el flujo de oxígeno y sangre a los músculos necesarios. El sistema nervioso responde de la misma manera cuando una persona experimenta emociones como la tristeza. También aumenta la respiración, al tiempo que abre la garganta para que pueda fluir más aire, lo hace expandiendo la glotis.
Eventualmente, el sistema nervioso parasimpático intentará deshacer estas respuestas reduciendo las actividades de alto estrés y consolidando los procesos de recuperación, como la digestión. Esto implica tragar, un proceso que requiere cerrar la glotis completamente expandida para que la comida no pueda ingresar a la laringe. Sin embargo, la glotis permanece abierta cuando una persona llora. Es esta lucha para cerrar la laringe lo que crea una sensación que se siente como un nudo en la garganta.
Otros efectos secundarios del llanto incluyen goteo nasal, voz inestable y labios temblorosos.
¿Es cierto que los hombres lloran menos que las mujeres?
Creo que todos hemos escuchado alguna vez esa frase tan repetida que dice que “los hombres no lloran”, incluso hay muchas canciones que la mencionan («Boys Don’t Cry»).
Las normas culturales han hecho que los hombres tiendan a internalizar su dolor en lugar de llorar y buscar apoyo.
Las investigaciones muestran que las mujeres lloran más que los hombres, pero los hombres se suicidan hasta 5 veces más.
En general las mujeres se sienten más liberadas. Tienen un estado de ánimo regulado y se sienten cómodos, ya que pueden sollozar más abiertamente que los hombres.
Los cambios en los niveles de estrógeno en las mujeres durante el síndrome premenstrual pueden aumentar sus posibilidades de llorar. Lo mismo sucede durante el posparto.